Tras la primera nevada del invierno que tiñó de blanco el casco urbano de Villa La Angostura este sábado, las condiciones meteorológicas vuelven a intensificarse. La Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) informó que a partir del martes por la noche ingresará un nuevo frente frío desde el océano Pacífico, acompañado por una masa de aire polar de origen antártico que afectará gran parte de la Patagonia y del país.
De acuerdo al organismo, se prevén nevadas de variada intensidad entre el miércoles y el jueves, con acumulaciones significativas en áreas de montaña, especialmente por encima de los 900 metros sobre el nivel del mar. En sectores altos de la cordillera podrían registrarse más de 30 centímetros de nieve, lo que genera grandes expectativas en el Centro de Esquí Cerro Bayo, que ya inauguró su temporada invernal y espera una mayor afluencia de visitantes ante la mejora en las condiciones de nieve.
Pero las nevadas no se limitarían a las zonas altas: hay una alta probabilidad de que también vuelva a nevar en el casco urbano de la localidad, repitiendo el fenómeno que sorprendió a vecinos y turistas durante el fin de semana.
La AIC advirtió que esta nueva irrupción de aire polar provocará un marcado descenso de las temperaturas, con heladas fuertes y persistentes durante las noches del domingo y del lunes, y valores extremadamente bajos hacia el próximo fin de semana.
Además, se anticipan posibles neviscas en sectores de la meseta rionegrina y condiciones adversas para la circulación vehicular. En este sentido, se recomendó extremar las precauciones al transitar por las rutas de la región, debido a la posible formación de “hielo negro” sobre la calzada, un fenómeno que reduce considerablemente la adherencia de los neumáticos y aumenta el riesgo de siniestros viales.
Las autoridades locales se mantienen en alerta y reiteraron la importancia de mantenerse informados a través de los canales oficiales ante eventuales cierres de caminos o interrupciones en los servicios. El invierno se instala con fuerza en la cordillera, dejando postales de gran belleza, pero también desafíos para la movilidad y la seguridad de los habitantes.