En las calles de Villa La Angostura, muchas veces se repite la misma escena: un perro asustado, un gato herido o una camada abandonada a la intemperie. Pero detrás de esas historias de desamparo, también hay otras de esperanza, protagonizadas por un grupo de mujeres que trabajan incansablemente para cambiarles el destino. Se trata de Ayuda Animal Voluntaria, una organización local fundada por Carolina Cami y un grupo de vecinas que decidieron convertir la empatía en acción concreta.
“Empezamos simplemente respondiendo a llamados de vecinos o publicaciones en redes, pero con el tiempo se volvió un trabajo diario, permanente”, cuenta Carolina en diálogo con el noticiero de Angostura Digital Televisión. Hoy, su grupo está compuesto por varias mujeres que dedican buena parte de su tiempo —muchas veces de madrugada o bajo la lluvia— a rescatar animales heridos, desnutridos o abandonados.
Una red solidaria que no descansa
Las tareas son múltiples: salir al rescate, brindar atención de emergencia, coordinar traslados al veterinario, cubrir tratamientos, y luego buscar un hogar responsable. “Cada caso nos duele, pero también nos motiva. Ver a un animal recuperarse y encontrar una familia es nuestra mayor recompensa”, asegura Carolina.
El grupo no cuenta con sede física ni financiamiento estable. Todo se sostiene con donaciones voluntarias y el esfuerzo personal de las integrantes, que muchas veces abren las puertas de sus casas para ofrecer refugio temporal a los animales. “A veces tenemos cinco o seis perros en tránsito, y cada uno con su historia. No podemos mirar para otro lado”, agrega emocionada.
Además del rescate, Ayuda Animal Voluntaria impulsa campañas de adopción responsable y concientización sobre la esterilización como herramienta clave para reducir la población callejera. “La raíz del problema está en la falta de compromiso. No se trata solo de rescatar, sino de educar y prevenir”, subraya Cami.
El grupo trabaja en contacto permanente con veterinarios locales, con el Área de Zoonosis del municipio y con otras organizaciones del país que comparten la misma misión. Su labor, aunque silenciosa, ha permitido salvar decenas de perros y gatos en los últimos años, evitando sufrimientos innecesarios y promoviendo una convivencia más humana y responsable con los animales.
Amor en acción
En cada historia hay entrega, empatía y una profunda vocación de servicio. “No buscamos reconocimiento, solo que la comunidad se involucre, que adopte, que castre, que no abandone”, resume Carolina.
Ayuda Animal Voluntaria representa, en palabras de muchos vecinos, uno de los rostros más nobles de Villa La Angostura: mujeres que, sin recursos pero con un corazón inmenso, logran transformar la tristeza en esperanza y el abandono en segundas oportunidades.
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