Así lo aseguraron en un informe que difundió este lunes la Secretaría de Planificación, Medio Ambiente, Catastro y Fiscalización de la municipalidad. Explicaron que los cambios de coloración del agua, como ocurrió días atrás en la desembocadura, responden a procesos naturales.
Técnicos de Medio Ambiente de la Municipalidad de Villa La Angostura elaboraron un informe tras inspeccionar y tomar muestras de agua del arroyo y del Mallín de las Balsas. Tras el estudio, descartaron evidencias de contaminación a causa de vertidos cloacales.
El informe que difundieron desde la Secretaría de Planificación, Medio Ambiente, Catastro, Obras Públicas y Fiscalización asegura que se hizo una inspección desde la Dirección de Medio Ambiente por el arroyo Las Balsas, “y se efectuó toma de muestras de calidad de agua, y elaborando informe correspondiente”.
“Se estableció un recorrido por los sectores de mallín de Las Balsas, con objeto de establecer algún tipo de irregularidad, no observándose ningún tipo de intervención y vertido”, afirmaron en el documento.
Explicaron que el incidente que una persona filmó días atrás y que se viralizó con una denuncia de un supuesto derrame cloacal, forma parte de un proceso natural.
“Estos procesos son naturales de todos los mallines patagónicos y sus desagües naturales de arroyos y a eso se debe el color marrón anaranjado, no se da en arroyos de régimen torrencial o sea los que provienen directamente de agua de deshielo, por no poder permanecer tiempos en proceso de estancamiento que, sí se produce en mallines, pantanos o turberas”, explicaron en el informe.
“Se concluye que no ha sido afectada la dinámica natural de arroyos provenientes de mallines o pantanos, respondiendo a procesos naturales de coloración y composición bacteriológica y física química”, concluyeron en el informe de Medio Ambiente del municipio.
Explicaron que el mencionado “Mallín de Las Balsas es conformado por un apéndice en sector sur-este del sistema del Mallín Grande que posee una superficie en torno a las 90 hectáreas”.
FOTO: En la figura se constata el estado actual del arroyo, en las inmediaciones del mallín sin intervenciones antrópicas.
La coloración
“Es de destacar que naturalmente el color marrón o anaranjado de los arroyos provenientes de mallines es debido al denominado hierro de turbera o hierro de pantano que es una forma de depósito de hierro impuro que se desarrolla en las turberas, mallines o pantano por la oxidación química o bioquímica del hierro transportado en solución”, detallaron en el informe.
“En general, los minerales de los pantanos consisten principalmente en oxihidróxidos de hierro, comúnmente goetita (FeO (OH)), como sedimento inorgánico o biógenico. Las bacterias del hierro son bacterias comunes en todo el mundo, que obtienen la energía que necesitan para vivir y multiplicarse por oxidación del óxido ferroso disueltos”, indicaron.
Destacaron que el “óxido férrico resultante es insoluble, apareciendo como un lodo marrón gelatinoso que mancha al contacto y que puede contribuir a la corrosión interna de las tuberías cuando el agua fluye a través de ellas”.
“Las bacterias del hierro no dan problemas de salud cuando son ingeridas en el agua, pero le dan un sabor desagradable”, aclararon.
El proceso
En el documento consignaron que “el agua subterránea que contiene hierro generalmente emerge como manantial. El hierro se oxida a hidróxido férrico al encontrarse con el ambiente oxidante de la superficie”.
“El mineral del pantano o mallín a menudo combina goetita, magnetita y cavidades o cuarzo teñido. La oxidación puede ocurrir a través de catálisis enzimática por bacterias de hierro”, señalaron.
“La magnetita se precipita en el primer contacto con el oxígeno y luego se oxida a compuestos férricos y los compuestos férricos se reducen cuando se exponen a condiciones anóxicas al ser enterrados debajo de la superficie del sedimento y se vuelven a oxidar al exhumarse en la superficie”, enfatizaron.
“Todos los foto-sintetizadores juegan un papel doble como productores de oxígeno y, por lo tanto, como oxidantes pasivos de hierro, y como superficies a las que el hierro puede absorberse o unirse”, afirmaron.
“Esto hace que las plantas acuáticas se incrusten fuertemente con un floculo anaranjado claro de oxihidróxido de hierro cerca del punto de liberación del gas oxígeno de las plantas”, puntualizaron.
“Factores como la geología local, la mineralogía de la roca madre, la composición del agua subterránea y los microbios y plantas geoquímicamente activos influyen en la formación, el crecimiento y la persistencia de los pantanos de hierro”, describieron en el informe.
Aseguraron que “la presencia de estas bacterias naturales puede detectarse por la película aceitosa que dejan en la superficie del agua. Este cambio de estado de oxidación provoca la precipitación de sólidos de hierro de grano fino cerca del punto de descarga del agua subterránea”.
Condiciones adecuadas
Dijeron que “una de las observaciones efectuadas se evidencia que el arroyo proviene del mallín lateral de Las Balsas y se mantiene en condiciones adecuadas, sin aportes de efluentes cloacales y sin intervenciones de canalizaciones, se indica que se ha realizado un pequeño endicamiento del arroyo en sector playa (por acción natural o por interrupción con arena y piedras), que ha juntado agua, para luego por rotura de ese pequeño dique arrastra el material hacia el lago”.
Afirmaron que el video que “ha sido de público conocimiento no se corresponde a la fecha de 2 de febrero, sino que data del 13 de enero 2023”.
Y aseveraron que en “mediciones anteriores no se identificaron contaminantes orgánicos provenientes de desagües cloacales, estando dentro de los parámetros establecidos para agua de recreación”.
“Se concluye que no ha sido afectada la dinámica natural de arroyos provenientes de mallines o pantanos, respondiendo a procesos naturales de coloración y composición bacteriológica y física química”, concluyeron en el informe de Medio Ambiente del municipio.
