La sobrecarga tributaria que tiene un boleto aéreo en Argentina genera un encarecimiento de un 112%, de acuerdo con un informe privado.
Los precios de los pasajes para vuelos de cabotaje e internacionales mostraron grandes aumentos en los últimos cuatro años, observándose también una reducción en los turismos emisivo y receptivo.
En 2019, un pasaje a Bariloche costaba $1.500, mientras que en 2022 costó $13.700, que representa un aumento del 813%. Por su parte, un vuelo hacia Mendoza, pasó de $1.300 en el 2019 a $12.200 en el 2022; es decir un incremento del 838%.
“Para ambos casos se tomaron los precios piso promedio de los vuelos más económicos para los recorridos seleccionados”, indicaron desde la consultora Focus Market, autora del informe sobre las condiciones de turismo emisivo y receptivo.
En cuanto a vuelos internacionales, un pasaje hacia Estados Unidos costaba US$ 530 en 2019, mientras que el mismo boleto aéreo hoy tiene un valor de US$ 570 dólares (tomando en cuenta un dólar para el 2019 de $60 y $375 para el 2022) mostrando “un aumento en dólares de 7,5% en 4 años. Es decir los pasajes de vuelos internacionales han aumentado en dólares”, sostiene el reporte.
La recarga de impuestos a los pasajes
Focus Market apunta que la sobrecarga tributaria que tiene un boleto aéreo en Argentina genera un encarecimiento de un 112%. Según el índice Amadeus 2022 de competitividad de la Asociación Latinoamericana de transporte Área (ALTA) detalló la carga de impuestos de un boleto aéreo internacional en Argentina comparado con países como Perú con un 18%, Bolivia 14%, Ecuador 12%, Uruguay 7%, Colombia 5% y hasta Chile y Brasil sin carga de impuestos.
“Lo que hemos realizado con la sobrecarga impositiva de los tickets aéreos no tiene antecedentes en ningún país de la región ni en el mundo. A su vez, en el presupuesto 2023 se añadió una nueva tasa para financiar a la policía de seguridad aeroportuaria”, señaló Damián Di Pace, director de la consultora.
“No sólo deterioramos nuestra balanza turística sino que la política económica tiene como fin no sólo evitar que los argentinos usen los dólares escasos del Banco Central sino que incorporan tasas y nuevos impuestos con afán recaudatorio. Es decir los dólares escasos están sólo si el turista asume más pago de impuestos en forma récord en la historia de nuestro país sobre un boleto aéreo internacional”, agregó el economista.
Según, la dirección General de Inteligencia de Mercado con los datos de Aeropuertos Argentina 2000, los vuelos internacionales disminuyeron 50% frente a 2019 previo a la pandemia y los de cabotaje lo hicieron en 34%.
Además, en 2022 solo quedaron 29 de las 42 aerolíneas que había en 2019 para vuelos internacionales, mientras que para vuelos de cabotaje se mantienen 3 de las 7 operadoras que volaban antes de la pandemia.